Caminando por los pirineos andorranos te topabas constantemente con esta flor. A mí me ha llamado mucho la atención porque con lo delicadas y tiernas que suelen ser las flores, esta la encontré especial y con mucha fuerza.
Ayer hizo 25 años, que tomé una gran decisión de la que no me arrepiento, todo este tiempo se me ha pasado volando, he hecho inventario y hay muchas cosas positivas, una de ellas es mi preciosa hija.
Lo más duro es, como recordando ese día encuentras a faltar personas queridas que han ido desapareciendo poco a poco.